Para comenzar a comprender el tema de las existencias...

Para comenzar a comprender el tema de las existencias es muy necesario deshacernos de las antiguas creencias tóxicas que nos han grabado por milenios, lo cual podemos lograr si nos damos el permiso de escuchar, leer, estudiar e investigar las enseñanzas que traen los diferentes maestros de la luz que se encuentran entre nosotros en esta época. Menciono “esta época” porque existen enseñanzas de maestros iluminados que ya no se encuentran en este plano tridimensional y que ya pasaron de época; entiéndase, para cada época existe una línea de enseñanza ya que todo evoluciona, todo se mueve y las épocas no son la excepción. Lo que nos funcionaba hace miles de años muy lejanos, ya no nos funciona en este tiempo. Si nos quedamos encerrados en una pequeña prisión de creencias sin aceptar nada más ni darnos la oportunidad de abrir la comprensión negándonos a cualquier tema que no sea lo que creemos, jamás lograremos ver más allá de lo que se encuentra frente a nuestros ojos ni descubriremos como les mencioné, algunos de los tantos misterios que esperan por nosotros. Solo seremos uno más del montón dormido viviendo una ilusión.

Tal vez me pueda explicar alguien que dude que tenemos miles de existencias, como es posible que una persona que nace ciega pueda tener sueños lúcidos donde puede ver claramente estructuras de lugares que nunca ha visitado ni claro está, visto, o ver rostros he incluso ver colores. Si estás personas que niegan la existencia de vidas anteriores logran explicar este evento de forma lógica y coherente sería maravilloso. Desafortunadamente se encuentran tan ciegos y dormidos en las fantasías milenarias que de seguro su respuesta sería que eso sucede porque Dios le dio la oportunidad a la persona de ver en sus sueños.

Una vez más se estaría confundiendo la realidad con la fantasía. Para aquello que carece de lógica superior es más sencillo simplemente decir que Dios lo quiso así pero a la hora que se les pregunta a estas personas porque Dios lo quiso así, su famosa respuesta para explicar algo que sale de su periferia de comprensión humana es que los misterios de Dios no se investigan. Entonces así como así, caen en la no investigación y se quedan ignorantes por el resto de sus días muy cómodos en su burbuja de ilusión individual.

Definitivamente nuestra propia existencia es un enorme cofre que lleva en su interior maravillosos misterios y cada uno nos ayuda a desentrañar otros aún más profundos. Si nos damos a la divertida e interesante tarea de estudiar tediosamente a un bebé, puede fácilmente desaparecer la duda de que el ser humano posee existencias anteriores a esta. Para aquellos que desconocen de este tema puede ser un complicado misterio a la hora de explicar muchas de las actitudes que se su bebé o sus reacciones a ciertos estímulos.

Podemos analizar que un bebé es un ser neutral al que se le tiene que enseñar lo que está mal y lo que está bien en cuyo caso es ilógico que sin enseñarles eso, ya conozcan muchos detalles que están bien o mal. El miedo es un sentimiento que adquirimos cuando ocurren ciertos eventos, como por ejemplo, si una abeja nos pica es muy probable que se cree en nosotros un miedo hacia ellas; si en algún momento presenciamos una extraña sombra moviéndose en la oscuridad de seguro comencemos a temerle a la oscuridad, si se tiene una experiencia donde casi nos ahogamos se le puede temer al agua y así sucesivamente. Entonces me hago la pregunta, ¿cómo es posible que un bebé le tema a un insecto o animal que nunca le ha hecho daño, a su propia sombra que se mueve con él o le tema al agua cuando estuvo nueve meses en líquido? Esto es bastante ilógico sino se conoce sobre las existencias o no se cree en ello.

Observando y estudiando a estos pequeños seres podemos darnos cuenta que muchos tienen reacciones a ciertos sonidos, ya sea que les provoque una imparable risa o un incomprensible miedo. Cuando mi hija mayor comenzó a gatear yo me acercaba por atrás y hacía un sonido que le provocaba que instantáneamente gateara rápidamente; algo que en el momento era muy gracioso pero que entonces me era incomprensible. ¿Porque le temía a ese sonido al nivel de querer huir de él? Es ahora que conozco sobre nuestras cientos y cientos de existencias que comprendo que su reacción era a una grabación, un recuerdo inconsciente lejano a esta vida que tan sólo comenzaba.

En algún otro momento tuve otra experiencia con mi hija mayor en la que su tío entró a la habitación con su rostro blanco por una crema que tenía puesta, cuando mi hija lo vio su reacción fue poner su rostro contra el pecho de su abuela y aunque aún no hablaba bien repetía una y otra vez, no, no, no mientras sacudía su cabeza de lado a lado. Una vez más una reacción de miedo incomprensible. Como les explique, el miedo se crea y no se puede crear sin tener una razón como por ejemplo que un niño se acerque a un canino para ponerle la mano y el animal muerda su mano. El niño no tenía miedo cuando quiso ponerle la mano, pero al morderlo se le creó desde ese momento en adelante. Si eventos como estos le crean un trauma a la persona que nunca logra superar, tenga por seguro que lo arrastrará hasta su próxima existencia convirtiéndose en un miedo sin sentido, incoherente incluso para la misma persona que desconoce de dónde nace.

Entonces, con sólo observar a los bebés nos daríamos cuenta que no poseen un comportamiento normal para un ser que llega por primera vez a este mundo. No me sorprendería que aquellos bebés que le temen a su propia sombra hayan trabajado en alguna vida anterior con la parte oscura, trayendo a esta existencia un recuerdo inconsciente de las sombras como representación de la parte negativa. Por otro lado, están aquellos que poseen la sabiduría de muy inteligentemente engañar a sus padres cuando juegan con ellos, en cierto punto se vuelve obvia su inteligencia incluso algunos hablan sobre el cosmos como si lo conocieran y de temas que pueden parecer incoherencias para sus padres cuando en realidad simplemente son temas que esta humanidad aún no comprende.

Zannia Cruz Discípula del V.M. Rafiel

Dirigente del Centro Atómico de la

Sabiduría del V.M. Rafiel

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