Actitudes densas...

María del C. Marrero
13 ene 2017
2 Min. de lectura

Cuando nos referimos a la naturaleza, es tomando todos los seres vivientes en diferentes estados de consciencia que cohabitan con nosotros en este plano humano. Los árboles, las plantas, las aves, en fin, todas las especies tanto minerales, vegetales, animales y humanas.

Lo que vemos afuera lo vamos registrando, grabando en nuestro interior creando una realidad, un universo interno lleno de todas nuestras vivencias. Esto quiere decir que es probable que cuando se encuentre en el plano astral, en su universo, este será idéntico a lo de afuera, no podrá diferenciar en donde se encuentra o cuál es su realidad.

Tal vez suene como una constante el hablar de la naturaleza en general, sin embargo, es un llamado a que salgamos de la rutina vivencial y nos armonicemos con todo lo que nos rodea, sensibilizarnos con el aire, el agua, la tierra, etc. Cada elemento es una parte importante para nuestro cuerpo y limpieza de energías distorsionadas.

Todos los elementos son parte imprescindible para estabilizar nuestro cuerpo físico y energético ya que somos pura energía.

Por otro lado, el Ser que es nuestra conexión directa con todos, es el que realmente debemos darle paso a su manifestación. Él es nuestra realidad. La parte pensante densa utiliza la energía para distorsionar todo, provocando una infinidad de situaciones que en nada favorecen nuestro recorrido. Claro está son experiencias que debemos tener sin embargo no quita que la utilicemos equivocadamente.

Al referirnos a densidades, estas las vamos generando diariamente, ¿cómo?; cuando gritamos, golpeamos alguna superficie con ira, ignoramos, menospreciamos, entre otras tantas. Si desmenuzáramos poco a poco un solo acto denso se podrá ver todo lo que desencadena. Ejemplo: el grito - ¿Por qué grita? Porque está molesto, sucedió algo inesperado, aquí vemos que se activó la ira. Aunque usted no quiera creerlo este simple acto de gritar lleno de ira desencadena un sin número de consecuencias físicas y energéticas. Estas a su vez se convierten en un bumerán que llegara de vuelta con una potencia mayor. De esto se puede seguir hablando y ver aún más profundo sus consecuencias.

María del C. Marrero

Discípula del V.M. Rafiel

Dirigente del Centro Atómico de la

Sabiduría del V.M. Rafiel