Muchos no comprenden...

Como ya conocemos bien, en estos momentos nos encontramos en la tercera dimensión o como también la conocen, la tercera esfera luminosa. Dentro de dicha dimensión nos encontramos en el plano humano, un plano tridimensional que se encuentra compuesto de un gran conjunto de experiencias que cada ser humano necesita integrar para continuar avanzando por el eterno camino de la evolución; como siempre hemos expresado. Todas y cada una de estas experiencias son infalible para nuestro crecimiento, desde la más simple hasta la más transcendental y no podemos omitir alguna porque entonces nuestra creación interna se encontraría incompleta.

Un ejemplo puede ser cuando un iniciado en su recorrido por el camino consciente se encuentra con experiencias que para él son muy fuertes y se hace la pregunta, ¿porque mi guía no me ayuda con esta situación? Regresamos al mismo punto, necesitamos integrar las diferentes experiencias. ¿Qué aprendería ese iniciado si su guía simplemente le resuelve la situación? Se encontraría el guía haciéndole un gran daño, siendo cómplice del atraso de su discípulo y el estancamiento en dicho nivel de conciencia en el que se encuentra dejando su creación incompleta. El discípulo no podrá alcanzar el próximo escalón, refiriéndonos a los niveles de conciencia, si no integra la experiencia por sí solo. Es como siempre explico; le puede decir a un niño que el fuego quema, tal vez lo entienda pero hasta que no pase la experiencia de quemarse no lo va a comprender ni a integrar en su interior para que quede grabada y plasmada dicha experiencia.

Como he mencionado en otras ocasiones, somos pequeñas grabadoras andantes. Muchas de las experiencias el ser humano las integra inconscientemente pero cuando se encuentra en el camino de la evolución, siendo guiados por un maestro de luz, se comienza a integrar más conscientemente. Desafortunadamente están aquellos aún dormidos y llenos de ego, que desean recorrer el sendero montados en la espalda de su guía para no tener que realizar el trabajo. Por otro lado, están los que no aceptan a un guía, ya que sinceramente creen que pueden recorrer el camino ciegos en las tinieblas y con sus propios demonios internos corriéndoles atrás, pero después de todo, esas son sus experiencias.

No podemos dejar de mencionar a aquellos que no se encuentran en el camino, no anhelan realizar el trabajo interno sino que prefieren quedarse muy cómodos en su sueño existencial, pero que muy bien reconocen a un Maestro de la Luz. Algunas de estas personas contactan a estos iluminados con el deseo de que los ayuden directamente con alguna situación. ¿Qué beneficio puede existir en que un Maestro le ofrezca su asistencia a una persona que no se encuentra realizando el trabajo de purificación interna? Una vez le ayude a la persona la misma regresará a sus comportamientos negativos, los mismos que le causaron las situaciones en primer lugar. Entonces, ¿para qué un Maestro dedicaría su tiempo y energía en ayudar a alguien que eventualmente regresará a lo mismo?

Muchos no comprenden nada de esto y cuando el Maestro se niega a ayudarlos lo acusan de farsante y demás. Hay que pasar por las experiencias de pagar lo que hemos hecho, de cosechar lo que hemos sembrado.

Zannia Cruz

Discípula del V.M. Rafiel

Dirigente del Centro Atómico de la Sabiduría del V.M. Rafiel

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