Para atraer o conectar con el Ser...

Donde hay luz las tinieblas se disipan. Cada ser humano constituye una porción de gran sabiduría que aunando las que se dicen sobre los grandes jerarcas, sostienen que somos luz, debemos de ir creando un canal lucido conectándonos con esa parte interna que somos. Para atraer o conectar con el Ser que somos se necesita de un trabajo interno de pura limpieza y liberación de los agregados psicológicos. Ir desmantelando todas las creencias que opaca esa conexión con lo más sencillo en nosotros.

La naturaleza nos muestra cada día como ocurre una simbiosis de todos los elementos que somos y tenemos integrado. Los componentes que nos nutre y nos sanan se encuentran a nuestro alrededor.

Si el ser humano no dependiera tanto de los centros que suplen los alimentos se daría la oportunidad de cultivar sus propios alimentos. Aprenderíamos a amar la tierra, nos maravillaríamos siempre al ver como el fruto o alimento se pone en manifiesto para nuestro deleite. Esa relación sería más estrecha y comprenderíamos que somos uno; una conjunción de elementos capaces de subsistir nutriéndose el uno al otro a través de esta relación. Respetarían todo lo que representan los elementos y nuestro entorno inmediato proporcionando así una gran cadena de nutrición.

Cada elemento constituye una escala en nuestro recorrido existencial poniendo al descubierto quien realmente somos. Más allá de comprender la simpleza del existir comprenderíamos la simpleza de vivir en plenitud sostenidos por los elementos primarios de nuestra escala evolutiva.

María del C. Marrrero

Discípula del V.M. Rafiel Dirigente del Centro Atómico de la Sabiduría del V.M. Rafiel

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