Así como llegan las preguntas correctas...

Han sido muchas las ocasiones en las que hemos repetido que existe mucho que conocer, dentro y fuera de este planeta, así que hacemos la pregunta, ¿por qué esta humanidad limita sus posibilidades con pensamientos cerrados y de poca profundidad?

Cuando se abran a lo que existe más allá de las fronteras humanas y sus diminutas posibilidades, entonces comenzarán a conocer mucho de lo desconocido. Deben diluir su pensamiento y expandirlo cada vez más hasta que cruce esas tristes fronteras humanas de pura ignorancia. Con esto me refiero a analizar, profundizar, escudriñar y hacer esas preguntas que nadie quiere hacer.

Si se detiene a pensar, el pensamiento llegará a un límite, pero si usted lo impulsa a ir más allá buscando esas preguntas que nadie hace, entonces comenzarán a llegar. Así como llegan las preguntas correctas, también llegarán las respuestas, pero hay que buscarlas y más importante saber en dónde buscar o más bien, a quién preguntar.

No se enfoque en lo que ocurre en su entorno, en la guerra que se está dando en aquel pueblo o ciudad, ni siquiera se enfoque en los mares o en este planeta. Salga de aquí, vaya más allá: planetas, sistemas planetarios, solares, etc. Si se deja lo cotidiano a un lado y se investiga lo divinal, superior y cósmico, se abrirán puertas a lo desconocido.

Ya es momento de que esta humanidad conozca sobre su origen cósmico y algo sobre lo que ocurre a cientos de años luz de este espacio en el que se encuentran, ya que son muchos los movimientos estelares que constantemente ocurren y aún mucho más lo que desconocen. Por ejemplo, están las muy famosas y hermosas “estrellas fugaces”, algo muy conocido y a la vez, desconocido.

Queremos que comprendan que cuando surge el avistamiento de una estrella fugaz, realmente eso no es una estrella.

Como hemos venido hablando, en las profundidades del cosmos existen grandes explosiones de planetas ya no habitados. Estos eventos son parte del equilibrio cósmico y de la continuidad de la evolución, como hemos mencionado en muchas ocasiones. Dichas explosiones crean innumerables esquirlas que pueden viajar por el espacio sideral por eternidades y eternidades.

Todo esto nos dice que el cosmos posee una longitud que es imposible para el humano medir o comenzar a comprender. A todas estas profundidades es a donde hay que permitirle al pensamiento navegar, para que así surjan preguntas las cuales sus respuestas nos expandirán la comprensión humana.

Por ejemplo, si analizamos, en esa inmensidad sideral tienen que existir planetas gigantescos, estamos hablando de quizás sesenta veces el tamaño de este. Entonces mi querido lector, si someten a dicho planeta a una explosión como la ya mencionada, ¿puede imaginar el tamaño de las rocas que puedan surgir de esa explosión? No estamos hablando de pequeños meteoros o esquirlas, sino de rocas que viajan errantes por el espacio sideral a velocidad vertiginosa y que quizás tengan el tamaño de una ciudad.

Podemos pensar en que esa roca cruza por cientos de planetas dejando su influencia. El ser humano necesita comprender que el cosmos posee su equilibrio y cualquier desequilibrio puede ser desastroso. Por ejemplo, un desequilibrio en la luna, ya sea en su homogeneidad, su núcleo magnético, etc., tiene la posibilidad de repercutir gravemente. La influencia de esa roca errante puede ser de gran impacto para un planeta menor; solo el campo energético que genera la fricción y la velocidad de una roca de esta índole, puede desequilibrar mucho en el espacio.

Observamos el firmamento en la noche y solo vemos puntos luminosos, quizás por eso olvidamos o no le damos importancia al hecho de que en ese espacio cósmico existen muchos movimientos estelares; quizás al ver todo quieto creemos que nada ocurre. Queremos decir que incluso los seres superiores tienen muy en cuenta lo que hacen y cómo lo hacen para no afectar el equilibrio. Algunos, como aquellos que forman la Confederación Interestelar, usan energías intersolares para desplazar sus naves cósmicas.

Eso es tener una conciencia de cuidado y respeto más allá de la que tienen los humanos que solo observan estrellas en la noche.

Debido a esos eventos estelares de explosiones de diferentes índole, es que existen seres que velan y cuidan algunos cuerpos celestes. Ellos han utilizado la energía disociativa de la materia en Marte, Saturno y algunas parte de la luna, para protegerlos de la amenaza de meteoros. El que toque suelo alguna roca errante puede tener efectos desastrosos. También cuidan cuerpos celestes pequeños de impactar con otros de mayor tamaño.

Nuestro gurú nos a hablado o más bien, advertido de cierta roca que se encuentra en nuestra órbita, algo que a menudo ocurre con ellas, que pasará cerca de este planeta como lo a hecho en otras ocasiones. Cada una de esas ocasiones tienen miles de años de separación y desafortunadamente para esta humanidad, ha llegado el momento nuevamente. Ya veremos cuáles serán sus influencias.

-Zannia Cruz- Discípula del V. M. Rafiel